Despega el servicio legal digital en Perú tras la existencia de 28 LegalTech

Wilfredo Murillo: «La tecnología en los servicios legales favorece a los usuarios en gran medida, principalmente en la rapidez en el tiempo de respuesta para determinados trámites»

Los servicios legales en Perú han dado un giro en los últimos años por el incremento de la tecnología. En Perú ya son 28 los proveedores LegalTech, cifra superior a la registrada en Ecuador (15) y Argentina (20), pero aún muy por debajo de Brasil (61), Colombia (53) y Chile (36), según la Guía Legal Tech en América Latina 2022, elaborada por Lawgic TEC. 

El uso de la tecnología permite a estas firmas mejorar la prestación de los servicios legales, logrando una reducción en los tiempos, costos de servicios y una mayor eficacia, entre otros puntos.

El medio Gestión dedica uno de sus últimos artículos a este asunto, dada su importancia para el país, y ha contado con nuestro socio Wilfredo Murillo para profundizar en ello. 

Se explica que el sector LegalTech cuenta con 11 vertientes: análisis y revisión de contratos, gestión de Compliance, B2B, B2C, evidencias digitales, formación, gestión de despachos, gestión y automatización de documentos, jurimetría, marketplace jurídico y servicios jurídicos online.

Según el estudio, las principales LegalTech en el Perú se dedican a la prestación de servicios jurídicos online y las evidencias digitales, que en conjunto representan la mitad del total de los proveedores identificados.

«El LegalTech no solo debería estar enfocado a las empresas»

Murillo explica que el mercado de las LegalTech es reciente en este país, pero que poco a poco ha empezado a tener una participación más notoria a nivel de América Latina. «La tecnología en los servicios legales favorece a los usuarios en gran medida, principalmente en la rapidez en el tiempo de respuesta para determinados trámites», añade.

Bajo su punto de vista, afirma que «se pueden pasar de respuestas de un día a dos o tres minutos, porque la respuesta está en la mano. La eficiencia en tiempo de respuesta podemos llevarlo hasta la décima parte del tiempo que uno responde cuando no tiene automatizador o procesadores de información».

Apunta, también, que de nada sirve automatizar estos procesos en el sector privado cuando en el sector público el tiempo de respuesta sigue siendo la misma. «Entonces, el LegalTech no solo debería estar enfocado a las empresas, sino que la brecha debería acortarse mucho más en el sector público, porque ahí es donde hay mayores procesos, tienen mayor información, tienen mayores asuntos de carácter legal como resoluciones, sentencias, autorizaciones o validaciones», sostiene Murillo. 

Si quiere leer la noticia completa en Gestión (bajo registro), pulse aquí.